El Colegio San Bartolomé sabe que es importante que su gente se sienta «en Casa». Por ello, recibe a cada uno de los miembros de su comunidad, otorgándole una en la cual afirmar su pertenencia.

Familias enteras de alumnos, ex alumnos y docentes del Colegio se reúnen en las Casas Hudson, Canning y Cunninghame-Graham —tres nombres emblemáticos del vínculo argentino-británico— que identifican tres modos distintos de participar. Cada una de las Casas tiene sus tradiciones, sus colores y sus distintivos que rápidamente se incorporan a la identidad de sus adherentes.

Convertirse en el Capitán de su Casa o en el Capitán del Colegio es uno de los máximos honores a los que aspira un estudiante del San Bartolomé. En la fiesta anual de los Sports, todo el Colegio se encuentra para competir, compartir, y celebrar detrás de las banderas y de las hinchadas de las Casas su alegría por formar parte de la Institución.

El desarrollo físico y la vida al aire libre son indispensables para crecer con libertad y creatividad. Así, los alumnos del Colegio, desde el Nivel Inicial y hasta el Nivel Polimodal, disfrutan de las posibilidades que les ofrecen las 10 hectáreas del Campo de Deportes Grantfield ubicado en Fisherton.

El Departamento de Educación Física del Colegio desarrolla un programa de rendimiento físico especialmente diseñado para cada uno de los niveles escolares con atención a la diversidad y a los intereses deportivos de los alumnos. Asimismo, fomenta la convivencia y el respeto por el medio ambiente a través de la organización de actividades semanales de recreación y destreza en Grantfield y la planificación de campamentos.

Los alumnos participan de campamentos de uno o dos días en Primaria y de alta montaña para los alumnos en Secundaria. Por otra parte, la exigencia alcanzada en rugby, fútbol, handball, hockey y atletismo federado permite la participación en giras, encuentros y torneos con otros colegios del país. La piscina exclusiva en Grantfield asegura también alto nivel de rendimiento en natación.